En una noche histórica, la ciudad conmemoró su primera radicación histórica con la presencia de Jacobo "Goyito" Gutiérrez Ballejos, descendiente directo de Gregoria "Doña Goya" Morales. El acto, cargado de emoción y orgullo, marcó un hito en el rescate de la identidad local.
"Como descendiente directo celebro este acto que es un reconocimiento a los precursores del desarrollo de la ciudad", expresó Gutiérrez Ballejos ante un público conmovido. Con precisión histórica, narró cómo el 9 de noviembre de 1791 quedó asentado oficialmente el nombre "Puerto de Goya" en un documento, dando identidad a este territorio.
El historiador describió el origen humilde de la ciudad: "Cuando Doña Gregoria Morales y su esposo Bernardo Olivera se instalaron, solo había montes, bañados y lagunas". Destacó su visión emprendedora al construir un amarradero natural que se convertiría en puerto obligado, impulsando el desarrollo económico mediante el comercio fluvial.
Con la frase "Viva Goya Señores", el descendiente cerró su intervención, sellando un compromiso colectivo con la memoria histórica. Esta celebración refuerza el sentido de pertenencia y honra a quienes forjaron con esfuerzo la ciudad que hoy conocemos.