El INDEC informó que la tasa de desempleo bajó al 6.6% en el tercer trimestre, una noticia positiva que refleja una mayor actividad económica. Sin embargo, especialistas señalan que este crecimiento del empleo se explica casi exclusivamente por el segmento informal, que pasó del 42.6% al 43.3% en un año.
Analistas como Daniel Schteingart, de Fundar, explican que el dato es consistente con la destrucción de empleo en blanco que reporta la Secretaría de Trabajo. La consultora Equilibra agregó que, en un trimestre de crecimiento económico, el empleo aumentó por el incremento del cuentapropismo y la informalidad.
Este fenómeno se relaciona con el crecimiento del monotributo, cuyas escalas fueron relajadas, y con la expansión de aplicaciones que promueven salidas laborales sin formalización. Si bien la baja del desempleo es una buena noticia, la calidad del empleo generado se convierte en el nuevo foco de debate.
El desafío futuro es claro: generar empleo de calidad que brinde estabilidad y derechos a los trabajadores. Lograr este objetivo será fundamental para consolidar una recuperación económica inclusiva y sostenible para todos los argentinos.