La comunidad del Paraje La Bolsa, en el departamento de Lavalle, celebró con gran fervor la fiesta patronal en honor a Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa. El obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecin, presidió la misa central y destacó la importancia del compromiso comunitario y el valor del bautismo como llamado al servicio en la Iglesia.
Jornada de fe y oración
Desde las primeras horas del miércoles, los fieles se congregaron para rezar el Rosario, que se recitó cada hora desde las 7 de la mañana, a pesar de las lluvias intermitentes. Por la tarde, monseñor Canecin participó en el Rosario de hombres, en el que se pidió especialmente por el trabajo y el bienestar de la comunidad.
La procesión en honor a la Virgen culminó con la celebración de la misa, donde el obispo centró su homilía en el lema del novenario: «Queremos ser esa Iglesia sencilla y ministerial». Destacó el papel del bautismo como fuente de protagonismo en la Iglesia y la necesidad de descubrir y poner al servicio de la comunidad los dones y talentos de cada persona.
Comunidad fortalecida
Al finalizar la misa, los presentes compartieron un guiso comunitario, fortaleciendo los lazos de fraternidad y fe. Los fieles expresaron su gratitud y destacaron cómo estas celebraciones los animan a mantener la esperanza y la fe en tiempos difíciles, guiados por el amor a la Virgen y su mensaje de unión y servicio.
Actividades comunitarias
La celebración continuará el viernes 29 de noviembre con una mateada comunitaria a las 18:30, en la que se armarán juntos las coronas de Adviento, símbolo del inicio del tiempo litúrgico que prepara la llegada de la Navidad. Además, se anunciaron actividades recreativas familiares para el fin de semana, fomentando la participación y el espíritu de comunidad.
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