La Sociedad Rural de Corrientes Capital genera indignación al imponer el nombre del Capitán Juan Carlos De Marchi a la plaza principal de su predio sobre la ruta 12. El militar, fallecido en junio de 2024, había sido condenado por 70 crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura, incluyendo secuestros ilegales y torturas a una beba de meses, sacerdotes, estudiantes, periodistas y trabajadores.
De Marchi cumplió 16 años y 6 meses de una condena de 25 años por dirigir el Centro Clandestino del Regimiento 9 en 1976, donde se desarrollaron detenciones ilegales, interrogatorios bajo tortura y condiciones inhumanas de cautiverio. La sentencia, confirmada por la Corte Suprema, describe cómo las víctimas eran mantenidas clandestinamente para luego decidir su destino final: ingreso al sistema legal, libertad o desaparición física.
Esta no es la primera vez que la Sociedad Rural muestra apoyo a De Marchi, ya que en 2008 publicaron una solicitada y organizaron una marcha pidiendo su impunidad. El acto actual es considerado por organismos de derechos humanos como una apología del terrorismo de estado y un desprecio hacia las víctimas y sus familias.
Un hecho que reabre heridas y cuestiona la memoria colectiva, demostrando la importancia de mantener viva la verdad histórica para construir una sociedad más justa y respetuosa de los derechos humanos.